Goichi Suda, conocido artísticamente como Suda51, es uno de los directores japoneses de videojuegos más famosos en la actualidad. En occidente, saltó a la fama gracias al clásico de culto Killer7, lanzado en PlayStation 2 y Game Cube, aunque la mayoría lo conoce gracias a No More Heroes, franquicia nacida en Wii. En Japón, sin embargo, su fama se debe a otro juego: Super Fire Pro Wrestling Special para la Super Famicom, aquí llamada Super Nintendo.
En 1994, Suda51 estuvo al cargo del guión y la dirección de su segundo juego en la popular franquicia Fire Pro Wrestling, titulada Super Fire Pro Wrestling Special. A primera vista, el juego es más o menos lo que todos esperan, un título que recopila a luchadores de las federaciones de lucha libre de principios de los años noventa.
Pero lo que hizo a Suda51 famoso en Japón no fue ni el juego ni los personajes, sino su argumento, concretamente el final.
La historia de Super Fire Pro Wrestling Special es inusualmente oscura. La historia comienza con un protagonista novato en su meta por alcanzar el Campeonato Mundial. Durante el camino, sin embargo, la tragedia golpea repentinamente al luchador con una serie de desgracias: el asesinato de su entrenador, la muerte accidental de uno de sus amigos más cercanos en el ring bajo sus propias manos —¿alguien dijo Ashita no Joe?—, etc. Después de todo esto, junto antes de que se celebre el combate final el protagonista es abandonado por su novia, mientras que sobre el ring el actual campeón mundial Ric Flair —llamado Dick Slender en el videojuego— asesina al compañero de lucha del protagonista y le confiesa que fue él el quien mató a su entrenador.
El juego termina tras el encuentro con Flair. Como el nuevo campeón del mundo, el protagonista se alza solitario en el ring de lucha, alcanzando su sueño tras haber perdido antes a todas las personas que le importaban. Rodeado de ovaciones de los fans, el protagonista se pregunta si de verdad aquello merecía la pena.
Tres días más tarde, se pega un tiro en la cabeza.
Con esta última escena, Suda51 fue catapultado al trono de la fama en Japón, asiento que aún ocupa por suerte de sus fans, y todo por realizar con maestría varios giros de guión que nadie esperaba. Algo que es digno de admiración en una época como la de Super Nintendo, donde los juegos por lo general solían carecer de tramas complicadas.
Fuente: Kotaku
Fundador, redactor jefe y editor de Deculture.es. Jugón desde la vieja escuela, amante de JRPGs y SRPGs, a poder ser de estilo clásico. Lector de cómics, amante del manga clásico.