Por qué New Nintendo 3DS no me parece tan mala idea

Nintendo mueve ficha y ha anunciado una revisión de su consola portátil que va mucho más allá de cuestiones de diseño o de tamaño: New Nintendo 3DS / XL.

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Nintendo ha movido ficha y ha anunciado una revisión de su consola portátil que va mucho más allá de cuestiones de diseño o de tamaño. New Nintendo 3DS y New Nintendo 3DS XL traen consigo, más allá de las novedades a nivel técnico que pueda ofrecer, un dilema bien gordo que afecta directamente al usuario actual de 3DS. ¿De qué va esto de ofrecer juegos exclusivos para un modelo de consola en la misma generación?

No es la primera vez que lo vemos, de hecho. Nintendo ya hizo un amago —fallido— con DSi y una serie de juegos que se pueden contar con los dedos de la mano. Sin embargo, en aquella ocasión la exclusividad de sus juegos respondía ante la incorporación de la cámara — Foto Showdown, Face Training o Picture Perfect Hair Salon fueron las grandes exclusivas que llegaron a Nintendo DSi.

Esta vez, con el anuncio de las New 3DSparece que los de Kioto quieran tomar un camino bien distinto a lo que venían haciendo hasta ahora. El ciclo habitual de las portátiles de Nintendo se ha situado en torno a los cinco años de media, y que Nintendo 3DS saliera en 2011 no hace sino confirmar que a la consola aún le queda bastante recorrido.

Entonces, ¿para qué sacar una nueva portátil ahora?

Por una parte la consola incluye esas cositas, como el segundo stick analógico, que la comunidad nintendera venía demandando. Por otra, lo que la diferencia de, por ejemplo, el esperpento de DSi: El protagonismo que Nintendo ha dado a aspectos como la personalización del modelo «pequeño» de la consola o la incorporación de la tecnología NFC.

Hemos llegado a un punto de no retorno en el que es bien difícil seguir mejorando la experiencia del jugador. Sin irnos muy lejos, PS4 y Xbox One no ofrecen el salto generacional en cuanto a gráficos que vimos en sus anteriores modelos; en cambio, apuestan por aspectos como la conectividad y la mera continuidad de sus marcas. Sí, hay proyectos como Prometheus que van aparte y que prometen dar una vuelta de tuerca a los videojuegos, pero decir que la nueva generación de consolas —Wii U incluida o no en lo de nueva generación, ahí está— supone revolución alguna para el mundo del videojuego es engañarnos.

Así que, ¿por qué no quedarnos donde estamos? La producción de videojuegos para Nintendo 3DS sigue en marcha, con los modelos 3DS XL y 3DS a secas. Ahí está y promete durar mucho más. Mientras, se ofrece un producto alternativo y mejorado que sigue dando cabida a esos juegos y a su base de usuarios, y al mismo tiempo hace las veces de «nueva consola».

Ayer me planteaba la siguiente pregunta. ¿Habría sido mejor la recepción si Nintendo se saca de la manga una portátil nueva? Era totalmente improbable, claro, con la 3DS a flor de piel. Aunque dándole un poco la vuelta a la tortilla, con New Nintendo 3DS se abre la oportunidad de prolongar considerablemente la vida de la portátil. De centrarse en los juegos porque el hardware no da para más vueltas de tuerca hoy por hoy en Nintendo. De seguir hablando de 3DS durante muchos más años.

Se mejora la calidad del 3D, se mejora la batería. No era imprescindible, desde luego —yo juego sin 3D—, pero ahí está para el que quiera hacer uso de ello.

Ahora habrá que ver cómo rinde esa mejora de la CPU y cómo afectará a esos títulos exclusivos que están por venir. Lo que está claro es que New Nintendo 3DS lleva a hablar de algo más allá de la revisión de una consola, y que mientras respete la producción general de títulos para Nintendo 3DS, lo único que tiene que ofrecer son cosas buenas.