Reseña: ‘xxxHolic Rei’ #1-2

El manga más esotérico y sofisticado de CLAMP

Recuerdo muy fugazmente leer algunos tomos de xxxHolic. Mi siguiente contacto con la bruja Yuko fue a través de Tsubasa: Reservoir Chronicle. Así que, disculpadme, porque hay muchas partes de estos tomos que no tengo claro si me resultan confusas al no haber leído todo lo anterior sobre Watanuki y la bruja a la que sirve, o si simplemente se trata de esas veces en las que se da aire de misticismo. En general los diálogos se desarrollan con frases muy cortas, dejando las cosas al aire, con una especial insistencia en decir lo mismo, pero cambiando el orden de las palabras. Vamos, como si se hubieran dedicado a fumar porros toda la noche y les costara mantener conversaciones coherentes.

El primer tomo puede mostrarse como una historia repetitiva, tanto en diálogos, pese a los escuetos que son, con viñetas exactamente iguales, pero con muy ligeros cambios sobre estas. Es muy curioso comprobar cómo en este caso, Yuko y Watanuki no tienen mayor labor que la de escuchar, pues realmente no está en su poder el resolver la maldición generada. Pero todo tiene su explicación según avanza la historia, ya que trata de la amistad y los males que se crean en esta: habla del desdén, del daño que se crea en una amistad, en cómo siempre se considera uno dañado y ve culpable a la otra persona, y en cómo una parte percibe como inferior a la otra.

Después hay una parte dedicada a otro encargo del que no os daré detalles, lleno de mal ambiente y que para Watanuki es bastante incomprensible, pero que Yuko, dentro de su conversación cual porrera para sí misma, parece saber perfectamente de qué va la cosa.

En cambio, el segundo tomo es una lectura más amena. Watanuki, acompañado de Domeki, son enviados por Yuko para ayudar a Yosuzume, un espectro de aspecto infantil muy tierno pero que nada tiene que ver con su edad real, en una tarea que ella no puede realizar. Pese a que se habla de deidades y de su abandono, es ligero de leer y muy agradable a la vista

El resto del tomo trata de una cadena que se inicia con 300 yenes, pasando de cumplir deseos a ser una maldición. Cómo algo iniciado como algo divertido y con buenas intenciones, puede llenarse de energía negativa y transformarlo en algo muy diferente.

Sobre el dibujo en esta obra de CLAMP, se puede resaltar el uso del blanco y negro puro, ya que no se utilizan tramas de puntos en ningún momento. Los recursos son fondos claros u oscuros, volutas de humo que dirigen la escena, o el uso de líneas para crear ambientes y separar en planos los personajes. No hay brillos que den más vivacidad al dibujo, ni en el pelo, ni la ropa. No es su estilo de dibujo más elaborado, pero tampoco el más simple. Los cuerpos son largos, pero sus extremidades no se estiran al infinito, aunque a veces lo parezcan, más por fallo de anatomía que por intencionalidad. Se puede decir que el dibujo cumple su función, pero no crea especial atracción.

En resumidas cuentas, xxxHolic es una secuela que te ofrece más misiones esotéricas, siguen los personajes que les gusta chinchar a Watanuki, el cual se pasa el día siendo la chacha de Yuko, y continúan las incógnitas de dar a entender que algo va a pasar, pero no decirte el qué. Y eso es parte del encanto de CLAMP y sus obras.

xxxHolic Rei #1-2
Lo mejor
  • El diseño del espectro gorrión nocturno Yosuzume y del perro montés Yamainu son especialmente bonitos y logrados.
  • La floritura en los bocadillos de texto de Yamainu.
  • El uso de las volutas de humo en blanco y negro, para guiarnos a través de las páginas y expresar los sentimientos que se manifiestan en los personajes.
Lo peor
  • A veces peca de una simpleza excesiva en las expresiones de los personajes, que parecen no cambiarla nunca.
  • Que por muy correcto que sea escribir güisqui en vez whisky, no deja de chocar visualmente.