La semana anterior dejamos Tales of Zestiria the X con Sorey y Mikleo decidiendo partir hacia Ladylake, donde se iba a celebrar un concurso para obtener la famosa espada del Pastor. Ahora retomamos sus aventuras.
Sin, al parecer, encontrar ninguna clase de impedimento en el camino, los compañeros llegan a la capital del reino. Allí conocen a una joven mercante —que ya vimos en el prólogo— que cuela a Sorey en la ciudad por algún motivo… No muy justificado. Las acciones de Rose y los Gavilanes se cambian con respecto al juego; estos ya no se muestran colaborativos, hasta el punto de que no se les da ninguna líenea de diálogo. Rose, por su parte, exige dinero por haber ayudado a entrar al muchacho, pero Sorey no le ofrece la Pipa de su abuelo. Una lástima ya que era un golpe a la dignidad de Sorey y que le hacía darse cuenta de lo diferente que es el mundo por el que ahora debe moverse.
No son los únicos cambios que encontramos con respecto al juego. El encontronazo con Lunarre es completamente distinto, pues declara que no tiene intención de matar a Alisha y tampoco se enfrenta a nuestros protagonistas. Los Huesos al Viento no hacen su aparición frente a Sorey, sino hablando con el noble Bartlow que expone la situación política de Hyland, en guerra con el imperio de Rolance. El noble pretende asesinar a Alisha, que cambia su discurso original de un «mantener la esperanza y la cabeza alta a pesar de las desgracias» a una cabezonería de postura defensiva y pasiva en la guerra. Ni siquiera parece dispuesta a promover la defensa hasta que los enemigos den el primer golpe.
Lo interesante no es tanto que su discurso cambie —una elección absurda, poco realista y que tampoco se sostiene demasiado— sino que por lo que señala el noble, Alisha tiene importancia política. En el juego se justificaba su ausencia de Ladylake porque se trataba de un cero a la izquierda que sólo tenía relevancia para el pueblo. Así pues ¿cómo se puede entender que Alisha vaya a investigar por su cuenta con tan pocos soldados? ¿Cómo se explicará que después acompañe a Sorey si en esta versión es un personaje político de peso?
Por fin hace aparición Lailah, en una ceremonia que no es tan festiva como en el videojuego, sino una apuesta política de Alisha. Lailah nos señala el gran nivel de Malicia que hay en la capital, que parece hasta quemar. Alisha nos da un discurso que resume por enésima vez sus ideas de pacifismo casi resignado. Eso dispara en la gente reunida una gran cantidad de sentimientos negativos ante la guerra: miedo, resentimiento, insatisfacción. Mikleo se ve gravemente afectado por este ambiente tan abrumador y, de pronto, hace aparición un Infernal, al que solo los Serafines y Sorey pueden ver.
Sorey se dirige a la Dama del Lago para pedirle que se ocupe del Infernal. Pero sólo puede hacerlo un Pastor. Entre tanto, los Huesos al Viento atacan a Alisha con la intención de asesinarla y cumplir así su encargo. Sorey decide tomar la espada para acabar con el Infernal, asumiendo la responsabilidad del cargo de Pastor después de que Lailah le haga la advertencia de que ya no podrá echarse atrás. Le aguarda una vida de aislamiento, una batalla solitaria. Pero Sorey aspira a un mundo donde los Serafines y los humanos puedan vivir juntos. Para ello, necesita convertirse en Pastor —y además sabe que es el único que, ahora mismo, puede salvar la situación— Mientras Mikleo se hace cargo de las llamas que se han expandido por el templo, Sorey se armatiza o fusiona con Lailah, que le ofrece sus poderes de fuego para vencer al infernal.
Luego, ante la estupefacción de la gente, Sorey acaba con el Infernal destruyendo parte del templo en el proceso y cae inconsciente. Es evidente que ha empleado un poder demasiado grande de golpe.
He acabado este capítulo con sentimientos encontrados. Aunque aprecio que la historia sea ligeramente más oscura, creo que para lograrlo ha dado demasiado enfoque a Alisha. Más del necesario. Esta es la historia de Sorey. Apenas sí hemos podido disfrutar de sus interacciones con la gente de la gran ciudad, su admiración por Ladylake ni ninguna conversación nerd sobre la Crónica Celestial. En cambio, el peso lo ha tenido Alisha, que va a ser víctima de un asesinato y una conjura política. Hasta el nacimiento de un Pastor acaba teniendo más relevancia para Alisha, que por fin ha encontrado a su Salvador, que para Sorey.
Me explico: al dedicarse tanto a mostrar la situación del mundo y particularmente la desesperanza de la princesa, no han expandido el rol de Sorey, como habría sido de esperar. No nos han mostrado por qué desea tanto que los Serafines sean aceptados entre los humanos, ni tampoco cómo se siente al ser el único que puede ver a Mikleo. Tampoco se nos ha mostrado cómo debe sentirse Mikleo al ser invisible para la gente en un mundo tan contaminado. ¿Afecta eso a su forma negativa de ver a los humanos? No lo sabemos. No se ha tratado.
En ese aspecto no puedo evitar sentir decepción. Alisha nunca me entusiasmó en el juego y, desde luego, tampoco me está haciendo ilusión su papel en el anime. Por supuesto que hay que esperar a ver cómo se desarrolla esta nueva y deprimente Alisha pero espero que se deje sitio a Sorey, Mikleo y Lailah para desarrollarse antes de que intenten ampliar todavía más el papel de la princesa.
Respecto al resto del episodio, los diseños siguen siendo impresionantes y da gusto ver el templo de Ladylake con un tamaño apropiado y detalles hermosos en sus muros. Ladylake es realmente grande y se ajusta perfectamente a la idea de la capital de un reino poderoso. El problema es el uso de del CGI fantasmal. En comparación con el resto de la brillante animación, el resultado es cuanto menos algo mediocre. Pero se puede perdonar cuando vemos el resto de la ambientación y las peleas. Durante estas, la música con coros es simplemente apabullante y combina a la perfección con las escenas. En especial destaca la transformación de Sorey en Pastor y el momento en que se fusiona con Lailah.
En definitiva, un anime de gran calidad tanto en la animación como en la música. En general es una buena adaptación que mejora varias escenas pero cambia demasiado otras. Pero es demasiado pronto para hacer un juicio de valor. Todavía queda por ver a dónde nos llevarán los cambios de guión.
Redactora de artículos variados (Neon Genesis Evangelion, Utena, Nier Automata, Berserk, D.Gray-man) sobre worldbuilding, personajes o narrativa. De vez en cuando alguno de opinión. Tengo un blog donde hago lo mismo pero con libros.
Tales of Zestiria the X
Tales of Zestiria the X es la adaptación al anime del videojuego homónimo de 2015. Se estrenó en 2016, anunciando 25 episodios, con animación y guión de ufotable. La historia sigue las aventuras de Sorey, un muchacho criado entre Serafines en Elysia, desde el momento en que decide convertirse en Pastor.
El Pastor es una figura delicada, que debe restablecer el equilibrio en un mundo atacado por la Malicia, y que debe encontrar a Serafines elementales para que lo ayuden en su tarea. Acompañado de su amigo de la infancia Mikleo, un Serafín de agua, la princesa-caballero Alisha y bajo la tutela de la Serafín de fuego Layla, Sorey emprende el duro camino para convertirse en un Pastor. Tendrá que superar toda clase de pruebas, enfrentarse a los que quieren usarlo como un instrumento político, a los Infernales afectados por la Malicia y a sus propios miedos y dilemas. A la vez, busca un mundo donde humanos y Serafines puedan convivir juntos.
La serie está en las manos de Haruo Sotozaki como director y cuenta con el talento de Motoi Sakuraba y Go Shiina en el aspecto musical, mientras que Akira Matsushima se encarga de diseño de personajes.
